¿Sabéis
qué? Conocí una vez a un payés que tenía un huerto muy grande y muy bonito, con
tomates, patatas, cebollas... tenía de todo y cuidaba muy bien el huerto, pero
en la zona donde había plantado zanahorias de vez en cuando le empezaban a
salir malas hierbas y claro, como tenía tanto trabajo, a veces no las sacaba...
y las malas hierbas continuaban creciendo y creciendo y no dejaban que las
zanahorias crecieran grandes y sanas. Un día, quiso poner zanahorias en
su ensalada y se fue al huerto pero ¿sabéis que encontró? Encontró unas
zanahorias pequeñas y arrugadas... ¿Eso quiere decir que era un mal payés? No,
en absoluto, enseguida empezó a arrancar todas las malas hierbas y a los pocos
días las zanahorias empezaron a crecer fuertes y sanas.
A veces
el huerto es muy bueno, el terreno es muy bueno, las semillas también pero nos
salen muchas malas hierbas y muchas piedras…. Y hay que sacarlas sino el
huerto no dará buenos frutos.
Objetivo:
con esta metáfora podemos ayudar a los niños a entender que muchas veces los
resultados que obtienen en los trabajos, en los exámenes, no son reflejo de su
capacidad sino del uso de estrategias que a ellos no les funcionan.
A partir
de esta metáfora podemos cambiar un “tienes que estudiar más” o “no puedes
pasarte tantas horas frente al ordenador”
por un “ me parece que están
creciendo malas hierbas… ¿te parece si las arrancamos?"
Es
importante conseguir que sean ellos los protagonistas de su historia, que
tengan ellos el control de su aprendizaje, que sean ellos los que detecten las
malas hierbas porque sólo ellos pueden arrancarlas.
¿Cómo les podemos ayudar a arrancar las malas hierbas?
Para
empezar, hay que detectar las estrategias ineficaces, aquellas que tenemos
automatizadas. Es importante que sean conscientes de cómo han realizado el
aprendizaje: ¿Cómo lo has hecho?
Después
intentaremos que él mismo encuentre nuevas estrategias: ¿Cómo crees que lo
podrías hacer?
Al
principio nos podemos encontrar que no saben qué estrategia utilizan, que no
detectan las malas hierbas, nosotros podemos ayudarles a reconocerlas y poco a
poco veremos como ellos serán capaces de verlas. Si aprovechamos el grupo se amplian las posibilidades de reflexión. Por
ejemplo, se podría presentar una dinámica grupal en la que cada uno pueda
comentar aquellas malas hierbas que cree han crecido en su huerto y que, de
alguna manera, interfieren en su aprendizaje. Los compañeros pueden proponer
estrategias que faciliten el arranque de dichas hierbas.
Imaginémonos que
hacemos un dictado y los resultados en algunos de los alumnos son malos. Nos
podemos quedar en “hay que estudiar más” o aprovechar la situación para
“detectar y arrancar malas hierbas”:
- ¿Cómo has estudiado el dictado? ¿Te ha funcionado? ¿Es una buena estrategia para ti o una mala hierba?
- ¿Cómo lo podrías hacer? ¿Buscamos otras maneras? ¿A alguien se le ocurre otras maneras de estudiar un dictado? ( generamos un listado de estrategias)
- Recordar que cada uno tiene que encontrar su estrategia, aquella que le funcione.
Arrancar
las malas hierbas no es sencillo porque generalmente son estrategias muy
automatizadas, son el camino más rápido. Una de las tareas más importantes del
DIRECTOR es la flexibilidad, si un camino no funciona, debemos coger otro.